La Junta de Extremadura destina 165 millones de euros al nuevo Plan de Empleo Autónomo 2020-2023

Favorecer la incorporación al mercado laboral a través del autoempleo e incrementar la contratación, incentivar la creación de empresas lideradas por personas trabajadoras autónomas con elementos de innovación, promover los sectores estratégicos e innovadores en los nuevos proyectos, estimular la puesta en marcha de empresas lideradas por mujeres, impulsar el autoempleo en zonas rurales, favorecer el relevo generacional y fomentar empresas lideradas por jóvenes son algunos de los objetivos del Plan de Empleo Autónomo.

El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, la presidenta de ATA Extremadura, Raquel de Prado Narciso; el presidente de CEAT Badajoz, Javier Dorado Rodríguez, y el presidente de OPAEX, Fernando Segador Díaz, firmaron ayer en Mérida este Plan dotado con 165 millones de euros de presupuesto, para los próximos cuatro años.

Fernández Vara ha destacado que el Plan de Empleo Autónomo de Extremadura 2020-2023 ha surgido desde el consenso y adaptado a una realidad compleja, que amenaza con el cierre de empresas y la pérdida de puestos de trabajo, por lo que tiene un carácter flexible y permeable teniendo en cuenta la vulnerabilidad del mercado de trabajo extremeño y será revisable en cada línea con el ánimo de adaptarse a un contexto socioeconómico de gran dificultad, característica que han destacado todos los firmantes del Plan

Además de los señalados con anterioridad este Plan, según ha señalado el presidente de la Junta, persigue aumentar la cualificación de las personas trabajadoras autónomas, incidir en sus procesos de acompañamiento y mentorización para lo que se ampliará el número de los Puntos de Atención Empresarial que pasan de 5 a 24, así como modernizar el comercio tradicional.

Este Plan modifica algunas cuestiones relacionadas con el autoempleo que suponen un cambio profundo en asuntos como reducir la burocracia, permite además, compatibilizar el régimen general de cotización con el especial de autónomos, mantener las ayudas aunque cambien la actividad, establece un plan para consolidar el empleo, posibilita la contratación por parte del autónomo de a otra persona, financiando la Junta de Extremadura su coste durante el primer año, se crea un plan de digitalización de las empresas.

Por otro lado, se continúa potenciando la cultura emprendedora en todas las etapas de la educación y la figura del autónomo/a colaborador/a, además, seguirá apostando por fórmulas de financiación, como los microcréditos, mantiene igualmente las ayudas a la competitividad empresarial, la artesanía, la mejora del comercio, el consumo y la economía social, y continúa con la promoción del relevo generacional y la segunda oportunidad.

El Plan de Empleo Autónomo 2020-2023 es especialmente sensible con las mujeres y el comercio tradicional y el medio rural, y, en su apuesta por la innovación, pretende generar espacios donde se puedan desarrollar fórmulas innovadoras de autoempleo a través de viveros, incubadoras y escuelas de micronegocios, así como desarrollar fórmulas innovadoras de formación como la formación online o las píldoras formativas adaptadas a las circunstancias particulares de las personas autónomas.

En Extremadura hay más de 80.000 autónomos y autónomas. Es decir, 1 de cada 5 personas de la región que trabajan a día de hoy son trabajadores por cuenta propia y suponen un importante peso en la economía de la región. En los últimos 4 años, Extremadura ha sido líder en el incremento de trabajadores por cuenta propia, con una subida del 21,96% y con 15.013 efectivos más. Así, el Plan de Empleo Autónomo anterior (2016-2019) ha finalizado con 83.390 personas autónomas en la región.

En ese período, 18.000 personas desempleadas han iniciado su actividad empresarial utilizando las líneas de fomento del autoempleo. El esfuerzo de la Junta de Extremadura en esta línea de ayudas ha sido de 121 millones de euros.

Además, la incorporación de las mujeres como trabajadoras por cuenta propia al mercado laboral ha sido una de las características de este periodo, liderando la región sobre el resto de comunidades autónomas.